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La ópera “Turandot” de Puccini, a través de RADIOMÁS.

El compositor italiano Giacomo Puccini
  • Miércoles 9 de agosto a las 21 horas, en emblemática grabación.
  • Karajan con la Filarmónica de Viena y elenco de primer nivel, para una demandante creación escénica.

Jorge Vázquez Pacheco

Xalapa, Veracruz. – La ópera inconclusa del maestro italiano Giacomo Puccini, en registro histórico y calificado con los más elevados puntajes por la crítica y los aficionados, será llevada a las ondas hertzianas este miércoles 9 de agosto a las 21 horas, a través de “La radio de los veracruzanos”.

El registro que nos ocupa data del año 1982 y fue encabezado por Herbert von Karajan al frente de la Orquesta Filarmónica de Viena, con elenco que incluyó a la soprano italiana Katia Ricciarelli, el tenor español Plácido Domingo, el mexicano Francisco Araiza y el bajo Ruggero Raimondi, en lo que se considera una de las jornadas discográficas más detalladas y mejor logradas para este drama lírico.

El origen de la historia

Aunque se da como un hecho que el libreto que empleó Puccini para su ópera se desprende desde la obra del poeta y dramaturgo italiano Carlo Gozzi, el origen de la historia en torno de una cruel princesa que decapita a sus pretendientes se pierde en la densidad del pasado. Se sabe de una añeja leyenda parecida en Oriente medio que se conoce como “La hija de Turán”, en alusión a una zona que formó parte del imperio persa. Gozzi se inspiró en versiones derivadas de aquella vieja historia para su tragicomedia “Turandot”, de la cual los libretistas Giuseppe Adami y Renato Simone tomaron los elementos básicos para dar forma al texto que emplearía el compositor.

Puccini comenzó su trabajo sobre “Turandot” hacia principios de 1921 y durante tres años avanzó hasta los esbozos para el acto III. Pero hacia octubre de 1924 se le detectó un cáncer en la garganta que terminó con su vida en apenas seis semanas. Falleció en Bruselas el 29 de noviembre. Consciente del inminente final de su existencia, asignó a Riccardo Zandonai la culminación de su ópera, aunque finalmente fue su alumno Franco Alfano quien asumió la tarea.

La ira real sobre los pretendientes

La trama nos remite a la ciudad de Pekín, en tiempos legendarios. La bella hija del rey Altoum ha decidido que cobrará venganza por el asesinato de su abuela a manos de un extranjero, de modo que observa en cada uno de sus pretendientes a un perverso a quien es necesario dar muerte. Propone tres enigmas que el aspirante a su mano debe resolver, pero todos han fracasado en el intento. Cuando aparecen Timur, un rey tártaro depuesto, con su esclava Liú, el pueblo chino se prepara para presenciar la decapitación contra un príncipe persa que no logró resolver los enigmas.

El hijo de Timur, de quien nadie conoce el nombre, decide afrontar la prueba y se erige victorioso, la princesa se niega a cumplir con el pacto (su mano habría de ser para quien resulte vencedor) y suplica que se anule este juramento, a lo que su padre se niega. El desconocido propone una solución: si Turandot averigua quién es antes del amanecer, podrá romper su juramento y condenarle a muerte. Cuando los guardias reales somenten a tortura a Liú para obligarla a que revele el nombre del desconocido, antes de inmolarse vaticina que Turandot será vencida por el amor y se rendirá ante Calaf. Ese es el nombre del príncipe desconocido.

Escena de Turandot, en su Acto I

Los desafíos de un drama escénico

Para los personajes principales, Puccini concibió un desempeño por demás exigente y cuya adecuada resolución va más allá de los alcances de muchos intérpretes. Así, en este registro encontramos a una Ricciarelli que hace lo posible por cubrir la tesitura de una Turandot que por momentos parece escapar de su potencial. Algunos críticos suponen que aquí cabría a la perfección la caudalosa húngara Eva Marton, quien por aquellos años se encontraba en plenitud de facultades.

Para el rol del príncipe desconocido se requiere voz de dimensiones dramáticas, algo que no encaja del todo en la cuerda tenoril de Plácido Domingo. Pero ello nos da la oportunidad de presenciar algo de esencia puramente emotiva: Domingo se ve exigido hasta el límite de sus posibilidades y su esfuerzo por alcanzar las notas sobreagudas le lleva a las fronteras del paroxismo en tres momentos clave: hacia la culminación del dúo “Gli enigmi sono tre, una e la vita”; en “Ti voglio tutta ardente d’amore” –acto II, agudo no impreso en la partitura– y al inicio del acto III, con el célebre “Nessun dorma”. Nada importa que al enunciar el tercer “Vincerò”, su agudo se escuche un tanto gutural. Plácido se escucha aquí absolutamente soberbio, con una contundencia lírica capaz de erizar la piel, aunque (debemos reconocerlo) en esta espeluznante eficiencia los recursos de orden técnico aportaron su importante porción.

Para su Liú, Bárbara Hendricks es capaz de destilar la dulzura que caracteriza al personaje, así como el impactante estoicismo con que resiste el martirio y se da muerte, antes que revelar el secreto que se le exige. La dirección de Karajan resalta el colorido en la partitura y conduce a la Filarmónica de Viena hacia un admirable respaldo en los momentos más grandiosos y espectaculares, como el poderoso concertante vocal que cierra el primer Acto.

La experiencia en el Teatro del Estado de Xalapa

En suma, podemos afirmar que no abundan las cantantes que, aún con pleno dominio técnico, logren emerger sin daños de la temible experiencia que supone recrear a la vengativa princesa china. Una anécdota inscrita en los anales del histórico festival “Junio Musical” propuesto por Francisco Savín con la OSX, es del todo ilustrativa.

En el Teatro del Estado de Xalapa, hace no muchos ayeres y sobre una producción universitaria con elenco en que Armando Mora participó como cantante y director de escena, la soprano francesa Florence Guignolet se vio en severos aprietos para resolver el compromiso. A un paso de arruinar voz y facultades, allí mismo aseguró que jamás volvería a cantar tan comprometedor papel.

“Turandot”, la obra póstuma de Puccini, se ofrecerá este miércoles 9 de agosto a las 9 de la noche, del día en el espacio “La voz humana en la música”. Podrá sintonizarse en 107.7 de frecuencia modulada, o en www.radiomas.mx

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